El ágata es una variedad de cuarzo microcristalino que se encuentra en rocas volcánicas y metamórficas. Es una piedra semipreciosa muy apreciada por su belleza y variedad de colores y patrones. El ágata se caracteriza por su estructura bandada o estriada, con diferentes capas o bandas de colores y texturas
Propiedades Terapéuticas
El ágata ayuda a equilibrar y estabilizar las emociones. Tiene propiedades calmantes que pueden promover la tranquilidad mental y aliviar el estrés y la ansiedad.
Es una piedra protectora que puede ayudar a absorber y disipar las energías negativas. Crea un escudo de protección alrededor de la persona que lo lleva, ayudando a mantener la armonía y el equilibrio.
Ayuda a mejorar la circulación sanguínea, aliviar dolores y molestias, fortalecer el sistema inmunológico y promover la salud general.
Características Físicas
El ágata está compuesta principalmente de dióxido de silicio (SiO2), que es el componente principal del cuarzo. Sin embargo, también puede contener pequeñas cantidades de impurezas, como óxidos de hierro, aluminio, manganeso y calcio.
El ágata tiene una dureza de aproximadamente 7 en la escala de Mohs, lo que significa que es bastante resistente. Tiene una fractura concoidea, lo que implica que se rompe en fragmentos curvos.
La densidad del ágata varía entre 2.58 y 2.64 g/cm³, dependiendo de su composición y porosidad.